No nos queda otra que follar

Aquí como en un mar de ojos

Y lleno de incongruencias ateas,

De traumas al libido

De oscuridades a la lengua

Y a la humedad

Pegarme en tu humedad

Y tu oscuridad

Puede ser un acto masoquista

Y a ti te gustan los actos masoquistas

Tengo las paredes cerebrales

Con labios incrustados

Y uñas encarnadas

Como lagartos comiéndose la carne

De hambre sexual

Tengo sed de que me respires

Y me hables cerca

Para verte mover los labios

Y que eso me provoque más sed

Tengo hambre de tu miedo

Y que tu miedo

Me provoque una angustia irreversible

Y me apriete a esa oscuridad tuya

Y que no quiera salir de ahí aunque pueda

Me voy contigo

A donde tu mente perturbada me lleve;

A violarme los demonios de tu cabeza,

A un camino de dientes

Y sumisión

Tu soledad y desperdicio por la vida

Es lo que me acerca a tu lejanía,

Mi soledad te va a acompañar

Para engrandecerte.

Estamos tan solos y este mundo es una mierda

Que no nos queda otra que follar;

Follar al despertarse,

Follar después de follar al despertarse,

Antes de fumarse un cigarro y después de fumarse un cigarro

antes de comer y después de comer;

Si es que tienes ganas de comer,

Follar antes de pensar en follar

El mundo tiene muchos pozos donde caerse

Y haberme caído en el tuyo para conocer mi soledad

Y descubrir la carencia de mi cuerpo,

Es lo que me ha hecho entender ­

Que no puedo concebir mi soledad sin la tuya

Y mientras te vistes, yo escribo a tu lado

Y no puedo escribir sin tener tabaco en mi paladar,

Y después de escribir;

Te vuelvo a desvestir,

Para tratar de descubrir que follar quizá no sea una salida,

Sino una condición;

Para atraer el miedo,

Que nos haga provocar esa felicidad

Que tanto buscamos

Y que nunca vamos a encontrar

Quiero agradecerte por todo el odio

Y la envidia que has depositado en mí;

Aunque para ti sea un acto de admiración,

Me ha hecho aprovechar los momentos

De alegría que me invento en mi cabeza

Tus gestos tántricos y elocuentes

Que se revuelcan en mi mente

Para apreciarte cerca y lejos de ti

En lo más degenerado

De tu oscuridad

Ven a mostrarme tu angustia

Para llenar este nuevo día vacío

Y vaciar este día lleno

No puedo concebir mi soledad

Sin la tuya. 

Sebastián Oyanedel Davison - Septiembre 2013