¿Quieres compartir conmigo tu más insana locura?

El sol está húmedo,

Mis labios tienen tabaco,

Mi lengua tiene el ardor de un café,

Mis pensamientos suelen seguir distorsionados

Mi carne está viva y quema,

Las arrugas de mi sonrisa ya son distintas,

Pero me gustan las tuyas,

Tienen una forma especial;

Un lenguaje único

Para describirme tu alegría,

Quiero robarte la almohada

Y dormir yo con ella,

Quiero regalarte un libro para que no lo leas

O dedicarte una canción que no te guste,

Sé que me dirás que te encanta…

Quiero besarte las pestañas

Y decirte cuán bien te queda esa ropa,

Quiero conversar contigo a oscuras,

Luego de salir de la bañera,

Secarte los pies y la espalda,

Besarte el cabello mojado;

Comer en la cama

Y quemarme la lengua nuevamente

Con el café,

Quiero que te duelan los hombros cuando los muerda,

Abrigarte antes que duermas,

Para luego destaparte;

Observar tu desnudez,

Tu más recóndita omnipresencia,

Quiero entender cada una de tus pocas lágrimas;

Cuando me digas lo que te importa,

Que descontextualices mis acciones,

Que te ame tan egoístamente

Como siempre lo he hecho

Quiero que comprendas mi soledad

Y mi insuperable odio hacia las cosas,

Que me digas lo mal que está,

Y luego callarte con un beso

Quiero que me calles de vez en cuando;

De la forma que sea,

Como tú quieras,

Cállame de vez en cuando

O siempre, no sé…

Quiero sacarte fotos cuando estés durmiendo,

Y reírme de ellas,

Quiero hacerte un café

y que me pidas el azúcar,

besarte la espalda cuando estés durmiendo,

morderte los muslos

apretarte las manos,

escuchar música,

hablar de cualquier cosa

que no nos interese,

alegar por cada cosa que den en la televisión,

y maldecir cada canal,

escucharte sin mirarte,

mirarte sin escucharte,

decirte cuanto me gustas

y decirte cuanto me caes mal a veces,

saludarte cada mañana

y no despedirme cada noche

Enfermarme y verte cuidarme;

Reírme de eso,

Maldecir el mundo,

Pero adorarte sólo a ti,

Preocuparme cuando no me hablas

Y no sepa nada de ti,

Molestarme cuando apareces y hagas como si nada,

Fumarme hasta mis pulmones,

Verte por la calle,

Tomar helado

Y que nos duelan los dientes

Sentir que te tengo cerca

Y no entender cómo vine a conocerte

Y que a veces se me olvide cómo y cuando

Y que cuando venga a recordar

Me emocione tanto

Y se aprieten hasta las entrañas

Que me hagas sentir estúpido y tan arrogante;

Sólo porque te ansío;

De una manera descontrolada,

Inagotable,

Distante,

Inconsciente,

Inestable,

Humilde y soberbia,

Infinita y mortal,

Entre mi sangre y tu calor,

Mi vivencia para ti,

Mis ganas de aprender de ti,

¿Quieres compartir conmigo

Tu más insana locura?...

Sebastián Oyanedel Davison - Enero 2015