De un funeral de labios
Traje los míos drogados
Hacia tu boca
Y me gusta tanto la maldad
De tu sonrisa…
Tus ojos huelen a alcohol añejo
Cuando te cubro los parpados
Y el lenguaje de tu tacto
Con ese humor macabro
Pellizcándome los muslos
Con los dientes
Me da tanta risa
Cuando vuelvo a escucharte decir
Lo patética que es la vida
Eres un error de la naturaleza
Y nuestra crueldad
Nos va enterrar felices por siempre
Tu; amor mío
Eres mi hogar
Mi familia indeseada;
Mi arrogancia
En ese abrazo lleno de veneno
Siento la impureza de tu sangre,
Recogido en el calor de tus venas
Siento el demonio dentro
Rascándome la carne
Estamos hechos para burlarnos
De nuestra absurda soberbia
Somos tan patéticos
Y nos queremos
Nos queremos ver bien muertos
De alegría
… El diablo haciéndome cosquillas
Y tu respiración en mi garganta
Como una serpiente tragándome el aire
Nuestros genes de maldad
Nos permitieron conocernos
para aprender el idioma
de las mentiras
con un diccionario de cursilerías
a verdad
Eres la oración
De mis fantasías eróticas
Llévame a mi hogar;
Allá en tus brazos
En la falsedad de tus ojos
Y tu lengua alcoholizada
La cajetilla ya está vacía
Y el cenicero sobre la cama
Tu lindo rostro
Del infierno
Para mí
Tráeme la naturalidad de tus pecados
Con ese amor irracional
Llévame allá en tus brazos
Los que ahora son mi hogar.
SEBASTIÁN OYANEDEL DAVISON - Agosto 2012
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